La gastronomía llega al teatro en una propuesta de la compañía catalana “LA FURA DELS BAUS”. Inspirada en la sangrienta tragedia de Shakespeare, “Degustación de Titus Andrónicus” sienta a la mesa a 30 afortunados espectadores a degustar las entrañas de los hijos del emperador romano Tito, adobadas por el quinto mejor restaurante del mundo: “Mugaritz”.
La semana pasada tuve la oportunidad de asistir a la presentación para la prensa, en los Teatros del Canal, de esta “locura romana” en la que el espectador interactúa con el espectáculo, sin sillas y de pie, en un festín que encuentra su hilo conductor a mitad de camino entre la civilización y la barbarie. Sin desmarcarse del todo de su tradicional estilo violento y en ocasiones visceral, La Fura, en DEGUSTACION DE TITUS ANDRÓNICUS, retoma elementos de su esencia escénica, y da un paso más allá trayendo a las tablas el mundo de la gastronomía.
Si hasta ahora en sus obras, la compañía catalana se limitaba a la interpretación exclusivamente gestual, en esta oportunidad ha adaptado los textos del “Tito Andrónico”, escrito en 1593 por Shakespeare, para combinarlos con otras disciplinas como el vídeo y la música, los cuales, junto con la iluminación y las plataformas móviles, se aplican en proporciones justas y exactas, como si de una receta de cocina se tratara. El resultado final es una gran bacanal que solamente 30 privilegiados espectadores pueden degustar. Para ello, deben entrar a la web que la compañía ha creado para tal efecto www.furatitus.com, en donde mediante un juego, tendrán que conseguir la acreditación para el convite.
El director Pep Gatell, afirmó en la rueda de prensa una frase que creo, resume magníficamente esta fascinante demencia: “Se trata de sustituir las palabras por imágenes, economizando en la definición del espacio escénico con el vídeo, una técnica que Shakespeare no tenía”.
La historia nos retrotrae al victorioso regreso del emperador Tito a Roma, tras una larga batalla con los godos del norte, en la que ha perdido a todos sus hijos a excepción de cuatro. En honor a la victoria, el sacrificio humano de algunos enemigos prisioneros hacen que estalle el más sangriento de los festines. Toda una bacanal nacida de la capacidad creativa del chef donostiarra Andoni Luis Aduriz,
jefe de cocina del restaurante Mugaritz de San Sebastián, considerado por la revista “Restaurant”, como el quinto mejor del mundo, y que cuenta ya con dos estrellas Michelin. Torrijas, uvas, peras escarchadas, algas deshidratadas, y la carne de los desafortunados hijos de Tamora, servida con los tatuajes que lucen los sacrificados, componen un menú muy romano, o mejor, muy caníbal –debo reconocer que subí al escenario con cierto pudor gastronómico-. El vino por su parte procede de las bodegas riojanas de Miguel Merino.
El precio medio por persona en Mugaritz, ronda los 200€. Quienes acudan por estos días a Madrid, pueden gozar de esta degustación por diez veces menos, y habrán experimentado el novedoso y vanguardista concepto de hacer teatro de La Fura dels Baus.
En Madrid estarán en cartelera hasta el día 19 de diciembre. La gira se extiende hasta el 2012, y para alegría de mis lectores suramericanos, Brasil está ya confirmado (Sao Paulo y Río de Janeiro). Argentina, México y Colombia están por su parte en la mira, y espero que las negociaciones salgan adelante para que puedan disfrutar de esta experiencia de convertirse en “caníbal por un día”.
Esto es genial. Quiero verlo.