Kruisheren Hotel

Maastricht, Holanda

Los miembros de la hermandad de la Santa Cruz, llegaban a Maastricht, Holanda, por allá en 1438, en época de cruzadas, habiendo recibido previamente en donación un terreno sobre el que debían construir su abadía. Las obras de todos los edificios tardaron cerca de 80 años, y durante ellos, la comunidad monástica fue ganándose el respeto de todos los ciudadanos por las acciones emprendidas a favor de los pobres y los enfermos. Más tarde, durante la Revolución Francesa, los monjes fueron expulsados, y el monasterio sirvió de guarida militar. En el siglo XIX se restablecieron las labores religiosas, pero con el tiempo el complejo quedó finalmente a la deriva del olvido. Fue el empresario holandés Camille Oostwegel, quien tomara la iniciativa de salvar el histórico complejo arquitectónico en el año 2000. Cinco años de reformas, de la mano de los más prestigiosos arquitectos e interioristas, permitieron abrir en 2005 un lujoso hotel de diseño en pleno centro de la capital de Limburgo, el Kruisheren Hotel, establecimiento bandera de la propia cadena de hotelería del señor Oostwegel, la Chateau Hotels & Restaurants.

Business-center

Lobby-I

Restaurante-I

El moderno mobiliario de sus 60 habitaciones contrasta con los históricos muros de una abadía del siglo XV, ofreciendo al huésped todas las comodidades posibles. Gran parte de los cuartos tienen vistas al patio del claustro, en donde en verano se instala una agradable terraza.

La iglesia gótica, en la que la orden veneraba a Santa Gertrudis, da cobijo al lobby, al business center, a la sala de lectura, al bar y al prestigioso Kruisherenrestaurant, así como a su bodega de vinos. Las plataformas transparentes con soportes metálicos que sostienen el restaurante, consiguen hacer sentir al comensal más cerca del cielo, en un ambiente que impacta por su sofisticación y creatividad.

El contraste entre el pasado y el presente, y de la arquitectura antigua con el diseño contemporáneo, hacen de este recinto un lugar único para relajarse.

El spa del hotel ofrece sofisticados tratamientos para el cuidado de la piel y una amplia carta de agasajos a partir de la hidroterapia.

Precio: Desde 225€ la habitación doble.