Son dos las torres de 23 pisos que componen este nuevo hotel de Copenhague, que abrió sus puertas en el mes de mayo de 2011. Inclinadas 15º en sentidos opuestos, las torres se alejan entre sí en la medida que ascienden, y cuando parecen tocar el cielo, se unen por una pasarela cerrada… En la distancia, simulan a dos bailarines vestidos de blanco y negro, que desafiando todas las leyes de la física, pretenden acariciar el cielo.
Todas sus 814 habitaciones gozan de unas vistas magníficas gracias al innovador diseño del estudio de arquitectos 3XN. Algunas de ellas, son exclusivamente para mujeres, un curioso detalle que han tenido en cuenta para su clientela de origen islámico. El complejo cuenta además con 32 salas para eventos.
Su “Skybar” es un agradable lugar para tomar un trago a la hora del ocaso mientras se divisan en la distancia tierras suecas. El mobiliario de todo el hotel ha sido encargado a importantes firmas de interiorismo y decoración danesas, que han conseguido que el Bella Sky se convierta en el hotel de diseño más grande de todo Escandinavia.